"FELICIDADES A LOS GRADUADOS"

Graduación 1ª Generación de Agentes de Pastoral 2009
Escuela de Formación de Agentes Parroquia de San Martín de Porres


El martes 7 de julio de 2009 un día muy especial para el grupo de 115 alumnos de la Escuela de Formación de Agentes de Pastoral de la Parroquia de San Martín de Porres, el cual concluyó con gran esfuerzo, perseverancia, sacrificio y entrega el ciclo de estudio el “Curso Medio Básico” del Subsidio Diocesano de Formación de Agentes laicos.

Los alumnos son laicos que se han comprometido a vivir una vida misionera desde su encuentro personal con Jesucristo vivo y Resucitado, que a partir de la vivencia del kerigma iniciaron un proceso de formación integral que tendrá su seguimiento para que sea además es permanente, tal como lo marca el Documento de Aparecida y nuestro Plan Diocesano de Pastoral, “Formación Kerigmatica, Integral y Permanente”.

Así, en un ambiente de jubilo y agradecimiento se comenzó con la con la Santa Misa presidida por nuestro Sr. Arzobispo D. José Guadalupe Martín Rábago, concelebrada por Sr. C. Apolinar Torres, Pbro. Joel Elías Morales, Sr. C. Eriberto Escalera y Diác. Dr. José Silvestre López.

Nuestro Sr. Arzobispo comenzó la celebración invitando a los presentes a vivir la Eucaristía exactamente como es, una Acción de Gracias al Señor por haberlos sostenido en este camino de aprendizaje de encuentro continuo con Jesús, y pidió dar a Él realmente el honor y la Gloria.
También agradeció a las personas que han trabajado en hacer posible ese tan esperado suceso.

En el Evangelio del día (Mateo 9. 32 – 38). Dios habla a los presentes y nos pide proclamar la Buena Nueva del Reino, sanar y tener compasión de las dolencias ajenas de aquellos que están abatidos como ovejas sin pastor. Pero sin duda nos invita a rogar a Él Dueño de la Mies, enviar obreros, pues «La mies es mucha y los obreros pocos».

En la homilía el Sr. Arzobispo después de felicitar a los alumnos, mencionó lo relevante de este grupo, el cual dijo ser uno muy especial (en relación a los grupos que en estos días se gradúan) por el diferente itinerario y proceso. “Lo de ustedes es distinto” dijo, hablamos de un grupo de personas que se han encontrado con Cristo, que han iniciado un proceso de maduración en la fe para dejarnos finalmente disponibles para el trabajo misionero. Sin duda alguna, que cada uno de ustedes tomó la decisión de iniciar este camino como resultado de haber experimentado de una manera atractiva y conmovedora el descubrimiento de Jesús. Y remarcó, Él fue quien puso dentro del corazón de cada uno el deseo de encontrarlo, y Él es quien que indica el camino a seguir, el convivir con Él, el entusiasmarse cada vez más y lograr cada día la oportunidad de entrar al misterio de la verdad de Jesús.
Comentó, como parte del proceso del discipulado la gran importancia de vivir una autentica conversión y del compromiso misionero que se asume después de encontrarse con el Señor. Otros elementos dentro de la formación mencionó, son: sacrificio, perseverancia y esfuerzo, y el luchar muchas veces contra el desaliento y la tendencia probablemente de la deserción.
Finalmente comentó la importancia de la vida y crecimiento espiritual, “ustedes no vinieron a la escuela aprender verdades de memoria, vinieron a aprender la Palabra de Dios que es Cristo mismo”.

Nuestro Arzobispo concluyó, “Yo creo que todos los de la Parroquia de San Martín de Porres pueden sentirse agradecidos con Dios porque ahora tienen un grupo de laicos comprometidos en el trabajo evangelizador, laicos dispuestos, capacitados y generosos, que es lo que verdaderamente pretendemos con nuestro Plan Diocesano de Pastoral y la Formación de Agentes en una Parroquia, tener formadores para poder formar a otros, no simplemente para quedárselo como un mero agradecimiento”.
En nombre de la Diócesis y en el suyo en particular dio las gracias y dijo: “el Señor sea su recompensa”. Así sea.

La invitación a los presentes en esta homilía es extender el Reino de Dios como verdaderos discípulos y misioneros viviendo una autentica conversión, una vida generosa con Dios y los demás pero sobre todo perseverar en la vida de formación integral, dar frutos que se reflejen en nuestra comunidad parroquial, familia y espacios donde nos desenvolvemos.

Al término de la celebración eucarística nuestro Sr. Arzobispo acompañó al grupo de alumnos para la fotografía de la generación.

En punto de las 9: 40 pm se inició la recepción donde se convivió y compartieron los alimentos. El Sr. Arzobispo generosamente bendijo los alimentos y compartió la mesa con los padres y sr. Diácono.

El Sr. Cura Apolinar Torres Ortiz dirigió unas palabras a los presentes. Dijo ser participe de la alegría de los graduados y aun más cuando se comparte con otros y agradeció por el acompañamiento de los familiares y amigos a este momento agradable de convivencia cerca de nuestro Pastor el Sr. Arzobispo, por lo cual pidió un gran aplauso por su presencia.

La entrega de las constancias a los alumnos que terminaron satisfactoriamente su curso Medio Básico, se realizó a cargo del director de la escuela Sr. C. Apolinar Torres y el subdirector el señor J. Guadalupe Hernández, nombrando a cada uno de los graduados.
La Dimensión Diocesana de Formación de Agentes, entregará a todos aquellos alumnos que culminen sus ciclos de su formación un reconocimiento diocesano, que les avalará sus estudios en cualquier parroquia.

Con la alegría que viene de Dios culminó esta celebración muy importante a nivel personal y parroquial, sobresaliendo los signos de fraternidad entre los presentes. Con fe y esperanza de continuar de la mano del Señor este camino de formación para que con generosidad salgamos a vivir nuestro discipulado misionero en compañía siempre de nuestra Madre Santísima, ejemplo de humildad y servicio.


¡Cristo el Señor, horizonte de la formación!


Por: Gabriela Estrada López.

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