Papá:
Señor, aquí estoy humildemente, trayendo a mi familia a pedirte que
aumentes nuestra fe. Se termina este año y detengo mi vida ante Ti, te pido
para mí y los míos fe, paz, alegría, fuerza, prudencia, y sabiduría. Quiero
vivir cada día con optimismo y bondad, llevando a casa un corazón lleno de
comprensión y paz para mi esposa y mis hijos. Te doy gracias por todo lo que
recibí este año, la bendición de tener una compañera y unos hijos que me has
prestado. Gracias por la fuerza interior que nos das para perseverar en la fe y
no extinguir la esperanza. Por la luz que nos das para comprender mejor cada
día tu voluntad que nada tiene que ver con la que este mundo maneja. Y si a
veces permites el sufrir y otras también el llorar, será para bien de todos
aunque no siempre así lo entendamos. Gracias por mi trabajo que con el cual yo
pude llevar lo necesario a casa. Gracias por todas las bendiciones recibidas.
Te pido guardes a mi familia de todo peligro y mal. Permite que en este fin de
año podamos reunirnos con mucho amor y alegría. Te pido fe y sabiduría para
seguir guiándolos y si he fallado, perdón Señor.
Mamá:
Señor, aquí están los que amo. En este año que se va, quiero dejar lo
que me oprime y hace daño, y quiero llevarme todo lo bueno que aprendimos en
familia aunque hubo pruebas las superamos con la fuerza de tu Espíritu, por
ellas aprendimos a vivir en comunión. Gracias por permitirme ser una parte muy
importante de esta familia, por darme la capacidad de guiar a mis hijos con la
ayuda de mi esposo, de servirlos y atenderlos, y a veces de reprenderlos
fuertemente para que crezcan siendo personas de bien y siempre tengan el deseo
de acercarse a Ti. Gracias por todo lo que me prestaste este año y después me
pediste, por el amor de mi esposo y mis hijos, por el pan que aunque a veces
pareciera no tener, Tú, en tu inmensa misericordia multiplicabas sin jamás
olvidarte de nosotros, por mi casa y todos aquellos que nos dieron la mano en
momentos difíciles y reafirmaron tu grandeza al no dejarnos solos jamás. Te
pido que guíes mi caminar yo procurare seguir el ejemplo de tu Santísima Madre modelo
de fe, poniendo en practica los valores del servicio, humildad, obediencia pero
sobre todo la fe y el amor a esta mi familia. Dame un año feliz, y enséñame a
repartir felicidad.
Hijos:
Señor, gracias por permitirme estar aquí con mi familia. Gracias por
mis padres que por medio de ellos tengo vida, que se han dedicado a buscar mi
bienestar, dándome lo esencial para vivir. Como hijo he recibido tanto, amor,
moral, pan, techo, estudios, a veces creo no merecerlos porque he llegado a no
valorarlos, pero cuando me doy cuenta del sacrificio que hacen mis padres,
siempre termino pidiendo perdón. Como hermano, no importando mí edad he sido el
guía de los pequeños y en ocasiones me han guiado a mí. Perdóname Señor, porque por falta de madurez no he sabido tomar
mi papel de hijo y de hermano, apartándome en ocasiones de ellos, dándole valor
a lo que no lo tiene. Te pido para ellos y para mí, la felicidad interior que
cada uno necesitamos, sabiduría, amor y comprensión a mis padres para que
juntos, todos seamos uno solo, como la Santísima Trinidad.
Todos:
Señor, nuestro Dios te bendecimos por tomar en tus manos nuestro amor y
nuestra familia. Ayúdanos a cumplir nuestra misión, ven a compartir nuestra
vida y ayúdanos a formarnos como padres e hijos, a ser testigos de tu amor en
nuestra familia y en la comunidad. Danos fuerza en los desalientos, comparte
nuestras alegrías, ilumina nuestra fe y nuestra mente para que conozcamos el
camino que tú has querido para nosotros, para poder darte gloria y alcanzar la
salvación y que tu fuerza nos aliente a buscar los ideales de tu reino y
realizarlos generosamente. Y permítenos en este próximo año decirte firmemente,
y con voz fuerte “Creemos, Señor, pero aumenta
nuestra fe”. Amén
No hay comentarios:
Publicar un comentario